El pasado 19 de junio, Zabdiel García Martínez, un valiente niño de 10 años, ingresó a la unidad de cuidados intensivos del Hospital Simón Bolívar debido a una peritonitis. Gracias a su fortaleza y a la atención médica, Zabdiel mejoró y fue trasladado a una cama de hospitalización, y por fin el 12 de julio recibió el alta médica y pudo regresar a casa con su familia.
Durante su estadía en el Hospital, su padre, el señor Carlos García, encontró apoyo en la Sala Familiar del Hospital Simón Bolívar del quinto piso. Donde pudo tomar bebidas calientes, calentar sus alimentos y, lo más importante, pasar tiempo de calidad con su hijo en un ambiente acogedor y familiar.
Zabdiel vive en el municipio de Chía junto a su familia, donde continúa su recuperación rodeado de amor y cuidado. Su historia es un testimonio de esperanza y muestra la importancia del apoyo familiar durante momentos difíciles.
Agradecemos al Hospital Simón Bolívar por su dedicación y al señor Carlos García por compartir su experiencia, recordándonos la importancia de contar con espacios familiares en los hospitales para el bienestar de los acompañantes de los pacientes pediátricos.